lunes, 30 de mayo de 2011

2o Foro Estatal de Migración.

Mayo 28, 2011.

En su visita a San Luis Potosí, con motivo del 2º Foro Estatal de Migración: miradas diversas a la Ley de Protección al Migrante y Movilidad Humana para el Estado, el Presbítero Alejandro Solalinde Guerra, Director de la Casa de Migrantes de Ixtepec, Oaxaca., destacó la importancia de venir a apoyar la presentación de dicha ley, dadas las altas condiciones migratorias que se presentan en nuestro estado.

Asimismo expresó que esta nueva ley de protección al migrante y movilidad humana es una oportunidad para apoyar a los migrantes, un lazo de fraternidad y un intento de reconstrucción e inclusión de este sector que históricamente ha sido criminalizado, y juzgado como intrusos.

En el mismo sentido dijo que los migrantes son el sector más olvidado y castigado de nuestra sociedad, por lo que son más vulnerables a la violencia que hoy en día se vive en todo el país, por lo que destacó la prioridad de atender a los hermanos y hermanas migrantes, desde esta ley que tiende a ser integral y que parece es un paso muy bueno hacia la humanización en el Estado.

“Necesitamos tener un México en donde todos quepamos, los que pensamos que buscamos la justicia, pero también los que pensamos la han transgredido, todos tenemos que caber ahí, no podemos tener un país de buenos y malos, tenemos que invitar a todos a formar parte de este nuevo México que nos merecemos todos, y dentro del cual están también los hermanos y las hermanas migrantes”.

Momentos antes de iniciar el 2º Foro Estatal de Migración, Alejandro Solalinde comentó en entrevista, que los cambios que se han dado en diversas delegaciones estatales del Instituto Nacional de Migración (INM) no es la solución, aseguró que son soluciones mediáticas, de maquillaje, de cara a la próxima visita del relator de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, programada para julio. Por lo que dijo que el gobierno mexicano debe decirle que esta administración ha fallado terriblemente en Derechos Humanos, y sobre todo, tratándose de los migrantes.

Aún no se toca fondo.

Consideró que aún no se toca fondo en esta problemática, “no sabemos lo que el Instituto Nacional de Migración ha hecho a favor de la delincuencia, todavía no se pueden dar datos, pero en algún lugar de la república se encuentran personas que son testigos, víctimas de una nueva entrega de agentes del INM al crimen organizado”.

De igual manera el Padre advirtió que están por descubrirse sucesos más graves que en San Fernando, Tamaulipas, donde se encontraron fosas clandestinas con cuerpos de migrantes, indicó que aún falta descubrir yacimientos de restos humanos especialmente en Veracruz.

“Lo de San Fernando queda chiquito, eso es solo la puntita de in iceberg, cuando empiecen a ver en Veracruz, nos vamos a quedar aterrados, tenemos información pero no podemos confiar en nadie, porque el gobierno de Veracruz y la Policía Federal han estado implicados en los secuestros”. En el mismo tenor informó que operadores de los mismos cárteles han hablado ante la Secretaría de Gobernación, y han hecho acusaciones muy puntuales sobre las autoridades en mención, así como el INM.

Un Gobierno Federal despreocupado de los Derechos Humanos, omiso ante la ciudadanía, y que se empeña en ocultar lo innegable.

Solalinde Guerra afirmó que por más que el Gobierno Federal se ha propuesto ocultar y negar la verdad, los hechos están aflorando, e inclusive la iglesia católica tiene mucha más información de la que se pueda imaginar, pero el problema es que no hay instancias a las cuales acudir, “porque sabemos que son juez y parte, que ellos están también implicados en la delincuencia”.

Aseguró que vincular a la migración con la seguridad es un error garrafal, porque el INM para empezar, no es una instancia policial, ni un ministerio público, sin embargo es “lo más descompuesto que tenemos dentro del gabinete, yo he sido testigo todos estos años, de cómo al migrante se le trata como un terrorista, como un delincuente, y se le golpeó y trató de lo peor”.

Consideró que los últimos 11 años de gobierno han quedado marcados por una gran despreocupación y descuido hacia los Derechos Humanos y un total revés a los migrantes, además de que vivimos una federación que no escucha a la gente, y un poder judicial que busca la justicia sólo para quien puede comprarla.

El Presbítero mencionó que cada día vemos un México rehén de la violencia, y que todo esto se pudo haber evitado dejando de anteponer el quedar bien con Estados Unidos antes que con nadie. Sin embargo cree que a estas alturas ya no hay remedio para este sexenio, pues si no hubo voluntad política antes, menos ahora, y sobre todo, no existe ninguna estrategia, de algún ningún color o partido que prescinda de la sociedad civil.

“La sociedad civil está harta ya de todo este montaje, de que unas cuantas personas nos mal
gobiernen, y que está harta también de toda la corrupción de los partidos, aunque tengo que reconocer que hay gente valiosa en todos también, pero la gente está harta, ya no quiere eso”.

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